Encantadora Finca De Campiña En Val D'orcia

Posicionada en un altiplano, esta espléndida aldea ofrece una vista panorámica única sobre Val d'Orcia, en provincia de Siena, en Italia, conocida por sus dulces colinas en todo el mundo, sobre las cuales encontramos hileras de olivos y viñedos.

Conduce a la finca que hoy está acondicionada como estructura hotelera una calle de tierra delimitada por majestuosos cipreses, típicos del imaginario ligado a la campiña toscana.

La espléndida propiedad está constituida por dos casas de campo de piedra, entre las más antiguas de la provincia, y un cobertizo. La primera finca de 600 m2 totales, que data de los primeros años del siglo XVII, se compone de un amplio jardín sobre el valle y dos edificios adyacentes. En el primero, en la planta baja se encuentra el claustro desde el que se accede a un primer living room con gran chimenea esquinada y piso de barro cocido; hay luego otro salón con chimenea y una cocina equipada, ambas con piso de resina. Hay una zona a reestructurar en la cual pueden ser realizadas dos dormitorios con dos baños y un baño de servicio. Desde el claustro se llega también a un dormitorio con baño. Al piso superior se accede ya sea desde adentro, por una escalera caracol, ya sea desde el exterior a través de una escalera de piedra. Se encuentran aquí otras dos habitaciones con un baño. La segunda finca está formada por una zona living con gran chimenea, tres dormitorios y un baño con ducha. Completa la propiedad una espléndida piscina en forma de frijol desde donde se admira la hermosa vista de la campiña toscana. Cerca de las casas, un cobertizo para la madera y la barbacoa de unos 50 m2. En posición escondida, el acceso a un garaje subterráneo de 100 m2.

La otra antigua casa de campo, de 350 m2, tiene planta cuadrada. La planta baja, actualmente a reestructurar, alberga un garaje y un cobertizo. Se accede al piso superior a través de una escalera de ladrillos. Luego se encuentra una acogedora zona living con una amplia chimenea, desde la cual se entra a una fascinante y luminosa cocina con un gran ventanal al Val d'Orcia y Monte Amiata. A lo largo de un pasillo encontramos una primera habitación con baño y otras dos habitaciones con otro baño.

Para gozar de la campiña y del panorama en absoluto relax hay una gran piscina rectangular infinita.

La aldea posee 80 hectáreas totales de terreno, de las cuales 36 dedicadas a terreno cultivable, dos a olivar, dos alrededor de las casas de campo y 40 de bosque, además de un manantial con una tina para recoger agua y un lago.

En una localidad separada respecto de las dos casas de campo, hay también un cobertizo de 240 m2.

Una verdadera joya para los amantes de la naturaleza incontaminada y quienes desean vivir en la campiña toscana en Italia en absoluta paz.