Lujosa Casa De Campo Con Piscina En Venta En Montepulciano ​

A pocos kilómetros del centro de Montepulciano, rodeada por el verde campo y los característicos olivos toscanos, se vende esta fabulosa casa de campo de lujo con piscina.

Su belleza se puede admirar paseando por el parque privado de 3 hectáreas que alberga una maravillosa piscina excelente para refrescarse en los calurosos días de verano y relajarse en la zona de solárium que se encuentra justo al lado de la piscina y a los pies del el cerro donde se levanta la Villa.

La propiedad parece pintada en un lienzo de olivos bien cuidados que conducen a la estructura elegantemente renovada manteniendo el auténtico estilo toscano con grandes ventanales, suelos de terracota y vigas de madera a la vista.

La propiedad se compone de tres cuerpos residenciales por un total de 650 m2.

La villa principal se divide en dos partes, una está dedicada al alojamiento y la otra a una residencia privada.

A la parte residencial se accede a través de una escalera exterior que conduce a la primera planta donde encontramos dos coquetos apartamentos independientes, con luminoso salón, cocina y zona de noche con dormitorio y baño.

El alojamiento se extiende en la planta baja con un maravilloso hall de entrada y un gran salón, un comedor destinado a desayunos y una escalera de caracol de hierro forjado que da acceso a dos suites con baño privado, chimenea y jacuzzi.

El segundo edificio se divide en dos apartamentos con acceso independiente, en el interior encontramos un bonito salón, una cocina y la zona de noche.

La tercera estructura es una espléndida cabaña ecológica, totalmente ecosostenible, de reciente construcción, de estilo moderno y luminoso; en su interior acoge la sala de estar, la cocina comedor y dos maravillosas suites con sus respectivos baños.

La lujosa propiedad se completa con hermosas terrazas con vistas a las colinas toscanas.

Esta lujosa masía en venta en las colinas toscanas es el destino ideal para aquellos que buscan la tranquilidad del campo sin renunciar a los servicios que ofrece el lugar, además de ser un paraíso para los amantes de los buenos vinos.